Laiseca, volvé, te perdonamos...

Para demostrar una vez más la brillantés de conceptos como semiosis ilimitada, objeto dinámico, interpretantes y reconocimientos (porque si no lo decía yo...¿cómo se enteraban? juas...), comienzo aquí un registro no exaustivo de lecturas de H. Para empezar, dos:

- Es para capitalizar el lanzamiento de la Línea H (con condiciones de reconocimiento ligadas a cierto pragmatismo de "realpolitik")

- Es un andamio (!) (con condiciones de reconocimiento algo "fumanchú", para usar un término de mi amiga Nina)

Entre los juegos de asociación libre y el espacio en blanco para todo tipo de prácticas de intervención urbana, voy a terminar pensando que es una loable campaña para estimular la creatividad de los porteños. ¡Gracias. Mauri!

"...las palabras no pueden ser livianamente transportadas de aquí para allá y de allá para aquí, cuidado, aparece luego alguien que dice, No entiendo."
José Saramago, Historia del cerco de Lisboa


¿Qué significa este fenómeno de blogs que de repente se vuelven "sólo con invitación"? Ya bastante complicada es la cuestión de público/ privado como para que interpongas un recurso de amparo para mandar saluditos "a todos los que me conocen". Seriamente, si no fuera por la posibilidad de que alguien ajeno a tu círculo te lea, ¿para qué carajo tenés un blog? ¿No alcanza con el mail, con una lista de correo, a lo sumo? Me parece que se está perfilando el formato blog como repositorio de las pelotudeces cotidianas. Pasen y vean mi absoluta pelotudez, pero todo junto y de fácil acceso.
Si llevo al extremo este razonamiento, tengo que cerrar este boliche antes de ayer...

¡Qué moderno! ¿Tiene pilas?

Mi administrador de correo electrónico es tan, tan, tan inteligente que filtra como spam mensajes de una dirección perfectamente válida cuando el mensaje hace referencia a cierta persona no grata (por herencia, digamos). El dato es que no está respondiendo a una regla prefijada. Es más bien algún tipo de conexión metafísica con mi inconciente. Es que la tecnología adelanta que es una barbaridad.

Mejor perderlos que encontrarlos

Ayer, en menos de dos horas, me crucé con Federico Olivera y con Osvaldo Bazán. Seguro hay una conclusión que sacar, pero no tengo idea de cuál.

Hoy, por una circunstancia de carácter excepcional, tuve que retornar a la que fue mi escuela secundaria. Allí encontré a la docente que era mi ídola en mis años mozos. Hoy es un clon de Kristina, con flequillito, reflejos, largas uñas manicuradas, botas de cuero de exportación, saquito de diseño, mucha josha y celular rosa. Acabo de caer en la más profunda depresión.

Para colmo, "como a los chicos les sirven los mensajes", fui exhibida como un fenómeno de circo ante la caterva de púberes al grito de "miren, miren, esha es ex alumna de esta escuela y hoy es egresada de la UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES".

Como además aclaró que después de a Licenciatura estaba haciendo dos años MÁS de Profesorado, se escuchó de fondo el murmullo con sorna de un iluminado... "¡¿Tánto le gusta (estudiar)!?" Cuánta verdad. Después dicen que la juventud está perdida....

Matando enanos fascistas a garrotazos

Sigo en mi campaña contra las campañas de Gobierno(s) de la Ciudad. Yo odiaba (ODIABA) la campaña A+BA. Me parecía de una estupidez supina. Ese intento de señalética anémica me parecía una opción absolutamente incongruente con esta ciudad.

Qué poco tiempo tuvo que pasar para que comenzara a recordarla casi con cariño, como ejemplo de una identidad elaborada. Una marca ciudad consistente, moderna, casi atractiva. Sólo hicieron falta un par de meses de administración macrista para que la comunicación visual se convirtiera en un botón de muestra de estrechéz de miras y de incapacidad.

Dejemos de lado la completa ausencia de uniformidad en la comunicación en vía pública (rasgo marcado, si los hay). En estos meses de gestión es posible armar un recorrido por unas cuantas piezas gráficas con serios problemas formales. Arrancamos con aquellas de verano "Aires Buenos Aires" con sus abúlicos globos blancos sobre deslucido fondo celeste patrio (que de entrada nomás eran ilegibles, por no detenernos en que los aires venían fraccionados en un cómodo y moderno pack promocional). Pasamos por la maravillosa idea para el festival de cine "Ya viste a Fellini. Mirá lo nuevo". Hay tanto para decir que hasta es mejor no decir nada. Como los afiches "No hay ciudad sin poesía" lavados, lavadísimos, en forma y contenido. No hay ciudad ni poesía. La poesía a la que aluden está muerta. La ciudad, sin sangre, declama "los zapatitos me aprietan, las medias me dan calor..." También tenemos "La ciudad trabaja". Comienza a perfilarse el problema detrás de la cuestión.. ¿quién corno es el enunciador?

Pero dejo para el final el pináculo del delirio. Acabo de ver una página en el Clarín de hoy con un ¿poema? titulando "Haciendo Buenos Aires" que recupera algunas de las boludeces "va a estar bueno Buenos Aires" con un malogrado juego retórico de aliteración. Estuve indignándome todo el día por la calle con las afichetas amarillo macri con una H gigante, que es todo lo que se lee a la distancia porque al gerundio "aciendo Buenos Aires" le dieron transparencia a mansalva. ¿Se entiende lo que comunica el gobierno de la ciudad? NADA. La H es muda. Es silencio. Los campeones de la gestión están gastando dinero público para decir "..."

No puedo decir que me sorprenda que la gestión macri no tenga nada que decir. No puedo decir que me sorprenda que no sepan nada de lo que "está bueno" de Buenos Aires; ni de lo que está mal, ni de lo que está peor. No puedo decir que me sorprenda que no tengan la menor idea de cómo hacerla mejor. Lo que me sorprende, y mucho, es que no tengan a mano un sólo amigo publicista/ diseñador con ganas de ganar algo de guita al que se le caiga media idea para armar la comunicación.


Actualización:
Inauguro con este gesto la sección "
Estamos trabajando para usted", posts a pedido, pensados para su satisfacción o le devolvemos su dinero.

Este es para R.

Un detalle más de la creativa campaña: no sólo no tiene identidad propia, además se apropia del Pantone Vaticano. Pasen y vean:




(Gracias al lacónico comentario de Natanael por la imagen de la derecha, nunca mejor dicho) Sólo una crítica más: si hay algo que Buenos Aires no es, es gris.

En un bosque de la China...

Un Chino.
Ap, pero qué lindo, qué lindo, qué lindo.

Eso.


Sigo incurriendo en el error de postear mensajes que son para "Querido Diario" en el blog. Así estamos...

Yo te ví: Iron Man

Sepan diskulpar el efecto fotolog, pero...
¡En este blog amamos a Roberto!


¿La peli? Muy bien, gracias.

El pan de cada día

¿Por qué tengo que elegir entre el desempleo y el estrés laboral? ¿No podría haber un bonito término medio: un laburito de medio tiempo, poco esfuerzo, buen clima y altos ingresos? ¿Es mucho pedir?

Valga esta introducción para la siguiente reflexión:

Como en cada período de trabajo a destajo mis hábitos alimentarios dejan bastante que desear. Pero, he aquí el descubrimiento: un buena alacena es lo mejor que uno puede tener. Acabo de preparar arroz hervido. Mientras como frente a la pc con la fuente apoyada en el regazo, coligo: estaría sumida en una profunda depresión de no ser porque el arroz es yamaní y lo condimenté con salsa de soja y curry en polvo. ¡Vean que ingeniosa, reinventando una cena miserable con todo el pelotudismo gourmet!

En otro orden de cosas...

Yo te ví: Dexter

Estoy viendo Dexter. Al principio estaba realmente enganchada con la serie, pero ahora... Tengo problemas con varias cosas, pero podría resumirlos en dos grandes áreas:

a) La construcción de los personajes parece, por momentos, bastante esquemática. Con el agravante de que la serie buscar construirles cierta pretendida "profundidad", que termina resultando altamente previsible. Es como si todo el tiempo insistiera, ¡ojo, que estos androides tienen alma! Pero las "vueltas de tuerca" siempre son altamente retorizadas. Un ejemplo, la jefa, que es una perra trepadora, tiene que luchar para defender su rol en un entorno machista, aunque en el fondo tiene un corazón tierno que se conmueve con los niños (Ajjjj). (De hecho, hay un misterioso asesino serial que mutila a sus víctimas, un verdadero Némesis para Dexter, que parece ser el hilo conductor de la historia en el largo plazo. Estamos en el capítulo siete y yo ya sospecho de su identidad. Ojalá me equivoque). El peor de los casos es, por supuesto, Dexter. Sobre todo porque, inicialmente la idea es atractiva. Estamos hablando de un muchacho absolutamente adorable cuyo pasatiempo es matar gente, desmembrarla y arrojarla al fondo del océano. El problema arranca cuando buscan aludir a un "oscuro pasado" que puede haberlo convertido en lo que es. O cuando insisten argumentativamente en que es un ser "vacío", sin emociones, para contradecirlo todo el tiempo en las acciones.

b) El segundo problema es bastante más grave. Y no es precisamente la crítica tonta que sobrevuela a la serie por la "estetización" de las muertes violentas. Se supone que Dexter, guiado por un férreo código moral que le impuso su padre adoptivo policía "canaliza" su necesidad de matar rastreando criminales que escaparon de la justicia. Acá es dónde ideológicamente la serie hace agua. ¿Lo que hace Dexter es una oscura forma de justicia? (Fox cree que sí, cuando lo llama "Justiciero serial"). Dexter, desde la más absoluta ilegalidad, espía, persigue, secuestra, tortura y mata a personas que, aparentemente, se lo tienen merecido. Eso nunca podría estar del lado de la justicia. Creer que alguien, por horrible que sean sus crímenes, merece morir a manos de Dexter sólo puede sostenerse si paralelamente se defiende la vigencia de la pena de muerte para el sistema legal-institucional. Si el protagonista mata a un mal tipo (siempre son completa, esencial y estereotipadamente "malos tipos", o "malas minas", llegado el caso), ¿ese crimen es menos repugnante? El hecho de que "Papi Policía" le enseñe a su niño a perseguir malechores enemigos de la "buena sociedad" le agrega una dosis más de incómoda familiaridad.

Pero todavía hay algo más. A pesar de esos atisbos del "trauma infantil", la historia cuenta que Dexter fue adoptado a una edad temprana por una familia que lo amó, lo contuvo, lo educó (tratemos de dejar de lado, por ahora, el perverso entrenamiento al que Papi lo somete para que canalice sus urgencias asesinas). ¿Se supone que alguien nace malo, o se vuelve malo, y en adelante no puede más que ser así? La maldad (y la crueldad) se convierte en un rasgo "esencial". Dexter ES un asesino; Papi sólo busca encauzarlo, jamás reformarlo. Es un problema de móviles: Dexter es puro Ego, siente placer al matar, eso le alcanza para justificar su conducta. Papi es una suerte de espurio Superyó: este sí, este no. El problema es que Papi sólo pudo pensar en una dimensión pragmática, cuando el verdadero problema es de índole ética. Dexter puede y quiere matar y algunas muertes son incluso "deseables", pero, ¿eso le da derecho a matar?

Algo nuevo, algo usado, algo ¿azul?

Tuve que pasar por el banco a hacer un pago por la inutilidad de cierto ente recaudador que no debería cobrarme en primer lugar. Una vieja demoró veinte minutos a toda la fila mientras lanzaba falsas acusaciones a la cajera porque no sabía contar su fajito de billetes. Al salir tuve la mala idea de pasar por el supermercado en un día de ofertas para jubilados y pensionados. Fue una fiesta de caminatas interrumpidas, colisiones con changuitos sin control y demoras infinitas en las cajas gracias a los adorables viejecillos bancarizados. Necesito urgentemente releer "Diario de la guerra del cerdo".

¡Volvieron los encuestadores telefónicos macristas! Siguen con su curiosa metodología de medición cuali-cuantitativa. El blanco ahora es la ley de comunas... Parece que es una "decisión burocrática que fomenta la corrupción". Lo más gracioso, primero preguntan si uno cree que Macri debe abandonar el cargo; después, si llegado el caso de la destitución, uno iría a una marcha (¡una marcha!) para apoyarlo. (Inicialmente, a mi me parece una mierda que Macri sea jefe de gobierno, pero ganó las elecciones, caramba. De todos modos, si una mañana se levanta iluminado y se da cuenta de que no tiene la menor idea de cómo gobernar esta ciudad, no sería mala idea que dimitiera. Luego, la pregunta por la destitución es sencillamente risible, si hay motivos para ser destituído, ¿qué es lo que habría que apoyar? Si no hay motivos para ser destituído, ¿cuál es la preocupación? ¿El mal karma?).

En otro orden de cosas, ¡los genios del marketing lo hicieron otra vez! La campaña de "Comé con color" con sus imagenes hiperrealistas de vegetales me habla a mí, me interpela hasta mi última fibra sensible. Arranqué con "Amarilla", pero estoy pronta a incorporar todo el círculo cromático. Confieso que me da un poco de asquito eso de la sopa deshidratada, pero hace una semana que hay verduras matándose de risa en mi heladera porque las muy putas no se cortan, se "saltean", se hierven y procesan en forma de sopa crema.