¡Apio verde tuyú!

Hoy me recibí de pelotuda. Espero sinceras felicitaciones. Se acepta como regalo el número de un buen exorcista; parece que últimamente no me alcanza la Señora para domar mis obsesiones.

Dicho esto, mi nueva teoría: los mensajes de texto están matando los vínculos. Nada dice "No me importás un carajo" como un afectuoso mensaje de texto. Siempre lo supe. Sólo necesitaba una buena comprobación empírica. ¡Maldito método científico!

1 comentario:

Orla Publicidad dijo...

yo creo isa, que los vínculos están agonizando, por miedo, pòr cierto estado de psicopatía general, no sé, pero están falleciendo. Y esos vínculos decadentes encontraron al fin su técnica y su expresión más compatible.
un beso!