¡Felisa me muero!

Por culpa de una mujer que no termino de entender si es boluda o hija de puta (aunque sospecho firmemente que ambas) tuve que pasar mi tarde matándole una ilusión a una chica que apenas conozco. Temo lo que el karma tendrá deparado para mí por esto. Tanto temo que hasta tuve la necesidad de volver a escribir acá.

Acá venía un recuento poco interesante de la última quincena, pero me lo ahorro. Sólo quería decir que estoy viva. Cuando vuelva, vuelvo.

No hay comentarios: